Creo
y quiero seguir creyendo, por duros que sean los vientos, que la alegría es la
mejor forma de reiniciar el camino de la adversidad. Las tormentas podrán
convertirse en huracanes, mas la voluntad humana puede desafiar los elementos.
Trabajo,
política, paro, crisis, sufrimiento, pobreza, delincuencia, son muchas las
oscuridades que asolan al mundo y pese a todo quiero seguir creyendo en
amaneceres radiantes, en veranos felices, en corazones que luchan y salen
adelante pese a las adversidades que el mundo nos quiere condenar.
La
vida
es bella, una lección digna de aprender para quien quiere construir un
lugar mejor para seguir viviendo y conviviendo. Creo, y quiero seguir creyendo,
que más dicha que dolor hay en el mundo digan lo que digan los demás.
No
podemos
seguir adelante. Falsa creencia pues mientras hay vida hay posibilidad
de salir del hoyo en el que nos han metido los demás. De la noche a la mañana
nubes grises han enturbiado el horizonte de una España que se creía alguien en
el marco de las relaciones internacionales. Solo tú puedes cambiar tu destino.
Bienaventurados
los tiempos difíciles porque ellos nos harán ver que la humildad y el trabajo
cotidiano es el que levanta los corazones.
Jamás
en mi intención apoyar a nadie. Apoya a quien te dé la gana, pero trabaja
siendo coherente con los valores de respeto, dignidad y libertad de las
personas. Digan lo que digan no te dejes llevar por los demás que la realidad es diferente a lo que nos quieren hacer creer.
Hoy
he tenido la suerte de escuchar un concierto en el asilo de Santa Mónica de Valencia,
antiguo convento dominico levantado en 1603. Estaba en estas lides cuando el
presentador, o más bien el guía del concierto, comentaba unas breves anécdotas
de San Felipe Neri, ejemplo de alegría en los tiempos difíciles. Ahora pasamos
por estos momentos, tan difíciles y ásperos que parecen semejantes a túneles
sin salida, pero si queremos seguir adelante tenemos que mantener viva esa
alegría y esa creencia de que, digan lo que digan, son muchos más lo que
perdonan que aquellos que pretenden a todo condenar.
La
gente
quiere paz, trabajo y amor, el resto son falsas expectativas que nos ha
traído un mundo carcomido por la ambición.
Creo,
y quiero seguir creyendo por duros que sean los vientos, que los hombres luchan
por el bien, no por el mal.
Raphael "Digan lo que digan"
Más dicha que dolor hay
en el mundo
más flores en la tierra
que rocas en el mar
que rocas en el mar
hay mucho más azul que
nubes negras,
nubes negras,
y es mucha más la luz
que la oscuridad.
que la oscuridad.
Digan lo que digan,
digan lo que digan,
digan lo que digan los
demás.
demás.
Son muchos, muchos más
los que perdonan
los que perdonan
que aquellos que
pretenden a todo condenar.
pretenden a todo condenar.
La gente quiere paz y
se enamora
se enamora
y adora lo que es bello
nada más.
nada más.
Digan lo que digan,
digan lo que digan,
digan lo que digan los
demás.
demás.
Hay mucho, mucho más
amor que odio.
amor que odio.
Más besos y caricias
que mala voluntad.
que mala voluntad.
Los hombres tienen fe
en la otra vida
en la otra vida
y luchan por el bien,
no por el mal.
no por el mal.
Digan lo que digan,
digan lo que digan,
digan lo que digan los
demás.
demás.
Digan lo que digan,
digan lo que digan,
No hay comentarios:
Publicar un comentario