Cuentos neuróticos.
Autora: Amparo Andrés Machí
Chiado Editorial.
97 páginas.
Acertado título para un conjunto de
relatos que ahondan en la psiquis de los individuos y sus carencias o
desviaciones.
En el momento de buscar inspiración
para escribir sobre los “Cuentos Neuróticos” de la escritora Amparo Andrés, he
dudado entre Kafka y Poe, entre el mágico mundo de la anarquía cotidiana y lo poéticamente
macabro del coleccionista.
Estamos ante un conjunto de relatos donde la
autora muestra la dimensión trágica del devenir azaroso de la vida de unos
seres que, poco a poco, se diluyen en las penumbras de sus dramas.
Sospechaba que perseguía los pecados capitales
a lo largo de la obra, cuando he tropezado en un duelo bergmaniano con la
crisis vitalista de Schopenhauer de fondo. La vida y la muerte, la felicidad y
la libertad, constituyen el motivo en el que se articulan los registros
discursivos de cada personaje.
En palabras de otros, hallamos un puzle
de la conducta humana perfectamente ensamblado; un conjunto de situaciones
alteradas por alguna circunstancia natural o psicológica.
En su lienzo se mueven seres, pintorescos
todos ellos, que rayando la locura nos llevaran a la última estación. Cautivos
futuristas donde la naturaleza sigue siendo la misma y la esperanza fluye en
cada línea, en cada sueño, en cada celda.
Irónicamente divertida resulta doña
Democracia; personalidades con genio y figura en un rancio abolengo de techados
quejumbrosos; tristes caminos cautivos con cierto sabor agridulce que empañan
el corazón. Fascinante el misterioso profesor X, individuo que parece surgido
del más puro Steampunk. Personajes todos ellos inolvidables, tan reales como
míticos.
Entre ellos recordar a la singular
Blancanieves, no la del cuento, la verdadera, la real, la que conocimos en los
bajos fondos de Valencia y que, además de este libro, también se desliza en la “Valencia
Canalla” (2016) de Rafael Solaz.
Nunca olvidemos que el factor humano
constituye el detonante que altera nuestros planes.
Temas reales, mundanos, cotidianos que
necesariamente se vuelven trascendentales como la vida, la muerte, la venganza,
la rutina, el tiempo, el castigo, la felicidad, la libertad. Relatos intimistas
donde la reflexión personal se convierte en el hilo conductor de las diferentes
situaciones.
Disculpa Amparo, si en tus relatos he
visto sobrevolar, de forma fugaz y certera, la sombra de Borges en algún relato
cercano a la estación.
Maravillosa prosa poética la de esta
mujer que solo muestra la realidad tal cual es aunque no la queramos ver.
Recordemos la cita de Flaubert: “La humanidad es como es. No se trata de
cambiarla, sino de conocerla”.
Fragmento
de “La ventisca”
La ciudad agoniza entre dos luces, repleta de
gente que vuelve a su casa tras la jornada laboral; las cafeterías rebosan de
clientela y los vendedores ambulantes de rosas y otros artilugios aprovechan
para intentar sacarse unas monedas; en las aceras los comerciantes bajan las
persianas de sus establecimientos con gesto de cansancio. Las luces comienzan a
encenderse y la calle queda pronto iluminada por alegres guirnaldas de
bombillas de colores que anuncian la pronta Navidad, pero para Blanca no serán
fechas muy alegres.”
Amparo Andrés Machí.
Sobre la autora:
Amparo es escritora y poeta, realizó estudios
de Filología hispánica. Además es grafóloga y perito calígrafo.
Miembro directivo de la Asociación de
escritores y críticos literarios de Valencia (CLAVE), y de otras asociaciones
relacionadas con su profesión.
Es socia de AESLA y de varias asociaciones
literarias como El sueño del búho o el Ateneo Blasco Ibáñez.
Durante más de seis años, ha sido “bloguera”
participando en varias publicaciones digitales, entre ellas la web literaria
argentina, “elaleph.com” con el blog “Caleidoscopio”, en Las Provincias y en
otras plataformas y redes sociales de escritores y poetas de alcance
internacional ubicadas en Ning.
Ha sido colaboradora del periódico suizo
Terra Migrante.
En 2006 es premiada en el Certamen Voces
Nuevas, de la editorial Torremozas, y se publica su poemario “Versos
cuánticos”.
En 2010 recibe una medalla de plata por
mención especial en el prestigioso Certamen Internacional Nósside, en Calabria,
Italia, considerado por la UNESCO como
uno de los cinco concursos internacionales de poesía más importantes del mundo.
De este mismo año son sus “Cuentos
Neuróticos”, escritos inicialmente bajo el pseudónimo de “Stelmarch”.
También ha publicado relatos en diversas antologías de la editorial
Hipálage y ensayos en otras antologías y cuadernos de poesía editados en la
Comunidad Valenciana.
Dos pequeñas joyas dignas de mención son: “Filoversando
en Nod”, viaje poético por la tierra de Nod y estos “Cuentos Neuróticos”.
En impresión subjetiva, reincido en destacar
la belleza de esa última estación, la poesía del cautivo, o la quimera de la
felicidad.
Desde que he leído a Amparo Andrés contemplo
las gotas frías con ojos diferentes.
Otro día haremos un recorrido cuántico por
los versos de Amparo, de momento finalicemos este breve artículo invitándote a
escuchar la entrevista que tuve el honor y el placer de realizar en El hidalgo
de las palabras.
A esta entrevista puedes acceder en:
Excelente. Gracias, Miguel
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